Al Capone dejo Villa Morra y se refugió hacia Lambaré

El pasado 23 de diciembre, Peter Stenger anunció a través del facebook que cerraba la sucursal de su pizzería Al Capone, que estaba ubicada en Lillo y Dr. Morra, luego de tres años de continua actividad en el local. Su quehacer gastronómico sigue sin pausas en su local central ubicado sobre la Avenida Perón casi Dr. Luis María Argaña, en el camino que conduce hacia Itá Enramada.

La decisión que tomó Peter se debe a problemas de la naturaleza económica del local. No cierran los números, nos decía en estos días, pese a que el local era frecuentado por 2.000 clientes cada mes. “Esto no da para cubrir los gastos financieros», sostenía. En el local se vendían pizzas, comida alemana y comida crudi vegana sobre pedidos y en servicio de buffet, respectivamente.

A pesar de que el volumen de clientes no era nada despreciable, el ingreso por persona no era muy elevado. Y conste que había días en que era difícil encontrar lugar en el local, lo cual nos consta personalmente.

El local situado en la esquina de Lillo y Dr. Morra, en cruz con ML Calentitas es un local que fue alquilado por Peter. Allí tuvo que construir el restaurante y equiparlo convenientemente  para entrar a funcionar. Hoy, toda esa inversión queda a cargo de los propietarios del inmueble y de los que en el futuro decidan alquilar o comprar la propiedad.

El lugar siempre funcionó como pizzería, pero en los últimos meses Peter le agregó un servicio de buffet al mediodía con cocina crudi vegana, razón por la cual a esa hora el local pasó a llamarse El Elefante Blanco. El proyecto no engranó como el hubiera querido y es todo una lástima ya que Peter Stenger es el chef de nuestro medio que mejor cocina y mejor conoce de la tendencia crudi vegana.

En los últimos años, Peter dio un giro radical en su forma de ver y entender la gastronomía. Por cuestiones de salud, se volcó hacia la comida crudi vegana y volcó todo su esfuerzo en conocer a fondo esta nueva tendencia al punto de convertirse hoy en día, en uno de los principales referentes del crudiveganismo en nuestro país.

Stenger nos confesó en una entrevista, hace aproximadamente un año, que en algún momento el debía divorciarse de la cocina tradicional para dedicarse a predicar y practicar la tendencia hacia una comida más sana. “Los seres humanos somos frugívoros por naturaleza”, nos decía adhiriéndose a esa tendencia que reconoce, por ejemplo, que es innecesario el consumo de carne vacuna.

Pero al mismo tiempo, reconocía que lo único que sabía hacer era cocinar y que se dedicaba a hacer pizzas porque era su principal fuente de ingresos. Peter soñaba, creo que sueña todavía con tener un restaurante que se dedique exclusivamente a la cocina crudi vegana, incluso su amiga Fiorella Migliore se inspiró en él y contó con su colaboración para habilitar Be Ok, que tuvo un  resonante suceso.

Hace meses que Peter manifestaba que estaba cansado, le llevaba mucho trabajo atender sus dos locales y pensaba que debía dedicarle más tiempo a su familia y a su estado de salud que cuidaba alimentándose puntillosamente, aunque a menudo reconocía que sólo parcialmente practicaba lo que predicaba. Tenía debilidad por los quesos y otras cosas, aunque abandonó el consumo de la carne.

Peter, hoy concentra su actividad, en su tradicional local de la avenida Perón, dónde está la central de la pizzería Al Capone. Allí también va a dedicarse a la elaboración de comida alemana y de comida crudivegana.